Las
ulceras se producen por una presión externa prolongada y constante, de
los tejidos blandos entre una prominencia ósea y un plano duro. Esto
origina una isquemia de la membrana vascular, produciéndose una
vasodilatación de la zona (evidenciado por un aspecto rojizo),
extravasación de los líquidos o infiltración celular.
Si
la presión no disminuye, se produce una isquemia local intensa en los
tejidos subyacentes, trombosis venosa y alteraciones degenerativas, que
desembocan en necrosis y ulceración. Este proceso puede continuar y
alcanzar planos más profundos con destrucción de músculos, aponeurosis,
huesos, vasos sanguíneos y nervios.
Factores:
- Presión
- Fuerzas de cizalamiento
- Fricción
- Humedad
- Nutrición insuf.
No hay comentarios:
Publicar un comentario